«El principal motivo para estar aquí hoy es celebrar que somos farmacéuticos a pesar de todo y reconocer y agradecer las vidas dedicadas a hacer bien este trabajo, a dar valor a la palabra farmacéutico y ayudarla a avanzar hasta adquirir nuevos roles que están en expansión y marcan hacia dónde irá el futuro de la profesión: ser más agentes de salud que nunca e incrementar los servicios asistenciales al paciente en colaboración directa con el resto de profesionales sanitarios».
El presidente del Consejo de Colegios Farmacéuticos de Catalunya y del Colegio de Farmacéuticos de Barcelona, Jordi De Dalmases, fue el protagonista de la séptima edición del «Esmorzars Sanitaris 2.0 a Casa Convalescencia», que organiza la Fundació Josep Laporte de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), con la colaboración de Pfizer.
El viceconsejero de Asistencia Sanitaria de la Comunidad de Madrid, Javier Maldonado, clausuró ayer Infarma Madrid 2014, una edición que ha reunido a 2.527 congresistas y 25.234 farmacéuticos –un 25% más que en Infarma 2012– que han visitado los stands abiertos por los 316 laboratorios y empresas expositoras, según las cifras facilitadas por Interalia, la empresa organizadora del Salón.
Las farmacias de Barcelona se han incorporado hoy al proyecto Radars (Radares) del Ayuntamiento de Barcelona, que vela por las personas mayores que viven solas en su casa. La colaboración se ha formalizado con la firma de un convenio entre el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona (COFB) y el Instituto Municipal de Servicios Sociales del consistorio, en un acto que se ha celebrado en la Ayuntamiento de Barcelona con la presencia de la teniente de alcalde de Calidad de Vida, Igualdad y Deportes, Maite Fandos, y del presidente del COFB, Jordi de Dalmases.
El cierre de farmacias catalanas convocado ayer en señal de protesta por la deuda acumulada de 416 millones de euros produjo una reducción de la actividad farmacéutica de más de un 80%, con 378 farmacias abiertas para cumplir con los servicios mínimos, de acuerdo con el Decreto 321/1996.
«El conseller debe explicar a los ciudadanos cómo piensa pagar sus medicamentos. Los farmacéuticos no pueden seguir pagando y no lo harán». Con estas palabras transmitió ayer Jordi de Dalmases, presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Barcelona, el malestar de los farmacéuticos catalanes, que atraviesan una dificilísima situación tras confirmarse que no cobrarán nada a fin de mes. Ni los tres meses de deuda acumulada por los medicamentos dispensados en noviembre y diciembre de 2012 y mayo de 2013, incluidos en el Plan ICO Proveedores, ni la factura de los medicamentos dispensados en el mes de septiembre. En total son 416 millones de euros en medicamentos que los farmacéuticos han tenido que avanzar para garantizar el acceso a los tratamientos y que podrían convertirse en más de 500 a final de año.