La edad madura a menudo se contempla como una época dorada de estabilidad y descanso que se alcanza tras concluir la crianza de los hijos y la etapa final de desarrollo profesional. En este periodo, se aspira a gozar de más tiempo libre para hacer todo aquello que antes no era posible, disfrutando en definitiva de una segunda juventud.
La Amapola de California se introdujo en Europa en el siglo XIX como planta ornamental, pero sus propiedades medicinales fueron pronto descubiertas y utilizadas. En las partes aéreas de esta planta se encuentra la eschscholtzina, un activo que ejerce un efecto beneficioso sobre la calidad del sueño en la fase de conciliación, y también sobre las fases del sueño profundo.