El acto central tuvo lugar el viernes día 30, en la actual sede de la Universidad de Sevilla, antigua fábrica de Tabacos. En el paraninfo se celebró un acto académico presidido por la Dra. Teresa García Gutiérrez, vicerrectora de Relaciones Institucionales de la Universidad de Sevilla (Profesora de Microbiología y farmacéutica), a la que acompañaban en la mesa el Dr. Benito Valdés Castrillón, vicepresidente de la Real Academia Sevillana de Ciencias (Catedrático de Botánica en la Facultad de Biología y primer secretario de la Facultad de Farmacia); el Dr. Alberto Ramos Cormenzana, presidente de la Academia Iberoamericana de Farmacia (Catedrático Emérito de Microbiología en la Facultad de Farmacia de la Universidad de Granada); Manuel Pérez Fernández, presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Sevilla; el Dr. José Manuel Vega Pérez, decano de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Sevilla (Catedrático de Química Orgánica y Farmacéutica), y el Dr. Oriol Valls, vicepresidente de la RAFC.
Todos los miembros de la mesa destacaron el espíritu de hermandad entre las academias y las instituciones en estos encuentros y, muy especialmente, en éste, por glosarse la memoria del que fue primer catedrático en la Facultad de Farmacia de Sevilla, y también Decano, el Dr. Claudi Faulí Trillo.
El Dr. Miquel Ylla-Català Genís, organizador y artífice del encuentro, pronunció una charla sobre la figura del Dr. Claudi Faulí. En su discurso realizó un recorrido sobre la trayectoria, tanto en Barcelona como en Sevilla, como profesional y catedrático, destacando su carácter abierto y comunicativo, haciendo glosa de su actividad académica y personal.
Es de destacar que en la sala estaban presentes la viuda del Dr. Faulí, dos de sus hijas y una nieta, que, emocionadas, siguieron el acto con mucha atención.
Aprovechando la estancia en la capital andaluza se visitaron diversos monumentos e instituciones, siendo muy remarcable la visita al barrio de Santa Cruz, a Los Reales Alcázares y al edificio de Capitanía.
El Dr. Agustín García Suero, a su vez, académico correspondiente de la RAFC fue un magnífico embajador por las tierras de la capital sevillana.