El Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM) ha participado en la quinta edición del Día de las Profesiones que organiza la Unión Interprofesional de la Comunidad de Madrid. La jornada ha tenido lugar en el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid y se ha centrado en el impulso de las profesiones para la recuperación económica y social, con el objetivo de dar a conocer a la ciudadanía y a los futuros profesionales universitarios la labor y actividades que realizan diariamente los 41 colegios y cerca de 400.000 profesionales que integran la Unión Interprofesional. En total, se han celebrado siete mesas redondas dentro de una edición que ha inaugurado el consejero de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid, Enrique López López, y que ha contado con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, en su clausura.
El presidente del COFM, Luis González Díez, ha apuntado que «muy poco o nada se está hablando del enorme reto de recuperación de la salud que tenemos como sociedad por delante. La COVID-19 ha dejado muchas secuelas que vemos a diario en la farmacia y que exigen la máxima colaboración de los profesionales sanitarios».
«Los pacientes nos hablan en la farmacia de agotamiento, de dificultad para respirar después de haber pasado la enfermedad, de problemas de memoria y de concentración. También de mareos, insomnio, pérdida de apetito o dolor de cabeza, estómago o garganta; son frecuentes, asimismo, los problemas mentales, como la ansiedad o la depresión», ha señalado durante su intervención en la mesa redonda «Retos para la recuperación física y emocional de la ciudadanía», que ha reunido a representantes de Enfermería, Veterinaria, Psicología, Trabajo Social y Fisioterapia.
Por ello, el presidente del COFM ha reivindicado el papel del farmacéutico de oficina de farmacia para prestar una primera atención que permita identificar y derivar a los pacientes que presentan una sintomatología persistente COVID-19, así como ofrecer consejos de salud que sean útiles. Además, ha recordado que «es urgente centrarse también en las patologías crónicas, ya que muchos pacientes han visto agravados sus síntomas durante la pandemia. El reto es mayúsculo y exige crear sinergias de colaboración entre los profesionales para tener éxito».
En su opinión, una de las claves para recuperar a los enfermos y promover la salud en el futuro es «optimizar el uso de todos los recursos a nuestro alcance, sin distinguir si son públicos o privados, porque detrás de ellos hay profesionales sanitarios». A su juicio, la red de oficinas de farmacia ofrece una oportunidad para reforzar la capacidad de la Atención Primaria, las redes de vigilancia de Salud Pública o la estrategia de prevención: «Convertir a las farmacias en centros de vacunación es una oportunidad para alcanzar los objetivos en inmunización que nos marquemos».
Por último, ha añadido: «La recuperación de la ciudadanía pasa también por restaurar la confianza en el Sistema Nacional de Salud y en las instituciones. Los ciudadanos necesitan nuevas garantías, un nuevo contrato sanitario», ha asegurado.