En la fase más dura de la crisis, en el año 2011, la factura farmacéutica de la región extremeña llegó a los 329 millones de euros. Cuando poco después el ejecutivo de Mariano Rajoy impuso los distintos tramos del copago, este gasto empezó a descender hasta los 278 millones de 2013. Tres años después, al final del pasado ejercicio, este concepto ha supuesto más de 311 millones de euros. Es un 12% más que entonces y un 3,25% más elevado que en 2015.
El gasto farmacéutico público total realizado en España en 2015 ha sido de 9.533,90 millones de euros, un 1,85% más respecto al gasto registrado en 2014. Esto supone que el gasto farmacéutico en España sube por segundo año consecutivo, aunque sigue por debajo de los niveles registrados en 2007, con un descenso acumulado del 14,81%. Respecto al gasto farmacéutico público por habitante, sube por segundo año consecutivo y se sitúa en 205,31 €, un 2% más que en 2014.
En junio el gasto farmacéutico a través de receta fue de 848,41 millones de euros, lo que supone que ha aumentado un 5,14% en relación con el mismo mes del año anterior. En la comparativa interanual se mantiene con un incremento del 3,38%.
Para que Extremadura pueda recibir las cantidades que otorga el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) durante el segundo semestre de este año, el ejecutivo autonómico debe garantizar que en 2016 contendrá el gasto farmacéutico y no rebasará el PIB previsto para el actual ejercicio, fijado en el 1,8%.
El gasto farmacéutico a través de receta fue de 798,73 millones de euros este mes de febrero, lo que supone que se ha aumentado un 7,21% en relación con el mismo mes del año anterior. En la comparativa interanual se mantiene con un incremento del 2,23%.
Si todo marcha bien, el próximo 1 de abril, el gobierno regional de Guillermo Fernández Vara tendrá aprobado el presupuesto autonómico de 2016. En estas cuentas, el Servicio Extremeño de Salud (SES) ha reservado un montante de algo más de 450 millones de euros que irán destinados al gasto farmacéutico.