Interrumpida la implantación de la receta electrónica en Alicante por la crisis

Ya ha llovido bastante desde el tres de febrero de 2010, fecha en la que el por entonces conseller de Sanitat, Manuel Cervera, presentaba la implantación del sistema de dispensación farmacéutica mediante receta electrónica en dos oficinas de farmacia de la localidad alicantina de Banyeres de Mariola. En aquella ocasión, Cervera, que estaba acompañado por el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Alicante (COFA), Jaime Carbonell, aseguró que la receta electrónica se extendería a las 800 farmacias de la provincia en los meses siguientes, pero a día de hoy aquella afirmación se ha quedado en nada y sólo las dos boticas pioneras utilizan el sistema. La crisis económica ha sumido a la Administración sanitaria valenciana en un estado de shock contable que amenaza con paralizar más de un proyecto. Por su parte, el sector de la farmacia alicantina también está atravesando un mal momento y no puede asumir los cerca de cien euros mensuales más gastos de instalación que implica para una oficina acceder a la receta electrónica. «Las farmacias de Alicante no pueden actualmente hacerse cargo de ese coste extra, ya que muchas de ellas se encuentran en una situación económica muy delicada derivada de los tres últimos recortes aprobados por el Gobierno», explica Jaime Carbonell.

La hoja de ruta de la universalización de la receta electrónica en Alicante pasaba por un ambicioso plan en el que se partía de Banyeres de Mariola para «avanzar por los pueblos de la montaña alicantina e ir bajando progresivamente hacia el mar, para concluir en el sur de nuestra provincia», comenta el presidente del COFA. «A finales de este año la receta electrónica debería haber estado definitivamente implantada en la provincia de Alicante», reconoce el veterano dirigente colegial, pero ahora su implantación «dependerá de la evolución económica».

Menos drástica es la visión que transmite la propia Conselleria de Sanitat. Fuentes de Sanitat aseguran que «no debería presentar problema ampliar a cinco oficinas de farmacia adicionales en las poblaciones de Onil y Castalla». El departamento ahora dirigido por Luis Rosado estima que al tener desplegado en el cien por cien de su red ambulatoria el sistema Abucasis, su plan de sistemas de información, a través del que se realizan más de un 85% de las recetas que se dispensan, «cuando se apertura en una población el servicio de receta electrónica, la Conselleria no debe realizar ninguna modificación, pues ya cuenta con el soporte tecnológico necesario». Así, en Sanitat van más allá y señalan el inicio de 2013 como plazo máximo para que culmine el operativo de implantación. «Tenemos una obligación establecida por el RD-L 9/2011 de tener el sistema de receta electrónica operativo el 1 de enero de 2013. Por tanto, deberemos tener presente en nuestros plazos esta obligación normativa», se apunta desde la Conselleria.

Destacados

Lo más leído