La unidad móvil “La meva farmàcia, la meva salut” ha alcanzado la mitad de su recorrido por la provincia de Barcelona y, hasta el momento, más de 100 farmacéuticos voluntarios han realizado un total de 3.501 pruebas de salud a cerca de un millar de personas.
La iniciativa, impulsada por el Col·legi de Farmacèutics de Barcelona (COFB) y la farmacéutica Sandoz, con la colaboración de CaixaBank y el apoyo de los ayuntamientos locales, ha visitado ya Mataró, Manresa, Igualada, Cornellà, Vilafranca, Terrassa y Sabadell. Entre los meses de noviembre y diciembre, la farmacia móvil también se desplazará a L’Hospitalet (5 y 6 de noviembre), Badalona (11 y 12 de noviembre), Granollers (18 y 19 de noviembre), Pineda de Mar (25 y 26 de noviembre) y Vic (2 y 3 de diciembre).
Pruebas de salud
En total, se ha atendido a 855 usuarios, quienes han accedido gratuitamente a pruebas como la medición de la presión arterial, control de peso y composición corporal, medición del colesterol y la glucemia, y estudio de la piel.
De cada prueba, los farmacéuticos entregan un informe impreso a los usuarios y ofrecen un consejo farmacéutico personalizado, en función de los resultados obtenidos. Además, se les informa sobre la aplicación digital “La meva farmàcia”, que permite consultar sus resultados de salud de forma segura y accesible.
Uno de los aspectos más valorados por los vecinos es conocer los servicios que ofrecen las farmacias, más allá de la dispensación de medicamentos. También destacan que este tipo de estudios realizados por los farmacéuticos se convierten en una puerta de entrada para prevenir problemas de salud.
Farmacéuticos voluntarios
La colaboración de los farmacéuticos voluntarios de las localidades visitadas ha sido imprescindible para el éxito de “La meva farmàcia, la meva salut”, permitiendo atender a un gran número de personas y ofrecer un asesoramiento integral. En total, han participado 144 profesionales, demostrando su compromiso con la salud y la prevención.
Gracias a esta campaña itinerante de salud, la ciudadanía ha recibido orientación personalizada para mejorar sus hábitos diarios y prevenir enfermedades. La iniciativa ha contribuido a fomentar la promoción de la salud y la prevención de enfermedades como la diabetes o la hipertensión, mediante información sencilla y comprensible.
Con todo ello, se pone de relieve el potencial de la farmacia comunitaria para contribuir al buen funcionamiento y sostenibilidad del sistema sanitario, mejorar la calidad de vida de la población y afrontar retos como el envejecimiento, las enfermedades crónicas y la polimedicación.