En este Día Mundial del Donante de Sangre, que se celebra bajo el lema «Más sangre. Más vida», se resalta que actualmente hay 62 países con servicios de transfusión de sangre basados únicamente en las donaciones voluntarias, mientras que en 2002 eran solo 39. Para ello en este día se persigue concienciar sobre que las transfusiones de sangre salvan la vida y mejoran la salud de millones de personas cada año. Pero también motivar a más personas para que se conviertan en donantes de sangre habituales, voluntarios y no remunerados, a fin de garantizar reservas de sangre suficientes para atender las necesidades nacionales, incluso en situaciones de emergencia. Por último, reconocer a los donantes habituales, voluntarios y no remunerados como modelos de conducta en materia de salud pública, pues es gracias a que tienen una vida sana y a que se someten a reconocimientos médicos periódicos que pueden donar sangre periódicamente.