Esta campaña, que contará con la participación de las 2.200 oficinas de farmacia de Barcelona, coincide con el Día Nacional de la Nutrición del 28 de mayo y persigue motivar a las familias para mejorar los hábitos alimenticios y luchar contra la obesidad infantil. «Dando herramientas para facilitar el consejo alimentario desde la farmacia estamos trabajando para evitar que en un futuro los niños sean adultos con problemas derivados del exceso de peso, como la diabetes y patologías cardiovasculares, entre muchas otras», explica Anna Bach, vocal de Alimentación y Nutrición del COFB.
La importancia de la alimentación en los primeros años de vida es clave. Según apunta la Dra. Montserrat Rivero, directora general científica de Laboratorios Ordesa y ex vocal de Alimentación del COFB, «algunos estudios existentes muestran que los niños con una alimentación desequilibrada o sobrealimentados tienen doble riesgo de padecer obesidad en la edad adulta».
Esta iniciativa cuenta con el apoyo de materiales gráficos: el plato de la campaña, en formato adhesivo, que irá pegado al suelo de cada farmacia; un póster; un díptico con consejos, y un vídeo que han sido elaborados y validados con el grupo de Promoción de la Salud de la Vocalía de Alimentación y Nutrición del COFB, con el apoyo de la Universidad Abierta de Cataluña. Por otro lado, dando un giro a la educación sanitaria como se ha planteado hasta ahora, la campaña también ofrece a los farmacéuticos herramientas de coaching nutricional para empezar a tener mayores habilidades a la hora de sensibilizar y acompañar a las familias a hacer cambios en los hábitos alimentarios.
Los farmacéuticos tienen un papel fundamental en la educación sanitaria, promoción de la salud y la prevención de la enfermedad. Así lo revela un estudio elaborado por Laboratorios Ordesa sobre «Alimentación Infantil y Atención Farmacéutica» realizado a 2.000 profesionales de oficina de farmacia que muestra cómo un 50% de los farmacéuticos dan proactivamente consejo alimentario. «Colaborando con todos los agentes sanitarios, escuelas, administraciones y sociedad en general, como en tantas otras ocasiones, los farmacéuticos queremos ser proactivos para contribuir a mejorar la salud de las familias», concreta Anna Bach.