El acto contó con la presencia de Boi Ruiz, conseller de Salut de la Generalitat de Catalunya; Carlos Guerrero, presidente de Banco Farmacéutico; Francesc Pla, vicepresidente del Colegio de Farmacéuticos de Barcelona; Felipe Hortelano, director general del Laboratorio Angelini Farmacéutica; y Jordi Roglà, presidente de Càritas Diocesana de Barcelona. Además, se pudo oír la voz de Jordi Cetrà, que habló en representación del voluntariado de la ONG.
Carlos Guerrero abrió el acto agradeciendo, en nombre de Banco Farmacéutico, el trabajo hecho por todo el voluntariado, además del apoyo, el esfuerzo y la implicación de las farmacias, entidades, instituciones y patrocinadores. «Todos ellos –dijo Guerrero– han hecho posible que en la actualidad podamos ayudar a 15.000 personas sin recursos económicos para comprar los medicamentos que necesitan, a causa de la situación de exclusión social y de pobreza en la cual se encuentran». Y expresó su agradecimiento cediendo la palabra al voluntario Jordi Cetrà, quien dejó claro que «el voluntariado es muy importante para intentar llegar allí donde las instituciones no llegan, allí donde parte de nuestra sociedad es insensible, allí donde, muchas veces, se mira hacia otro lado».
Iniciativa necesaria
Precisamente el conseller de Salud, Boi Ruiz, reconoció que el deterioro progresivo de valores sociales y colectivos ha llevado a un fuerte endeudamiento de las administraciones públicas, empresas y ciudadanos, lo que «como siempre» ha acabado afectando especialmente a los más débiles. Para Boí Ruiz «Banco Farmacéutico es una iniciativa que da una primera respuesta a la situación en la que nos encontramos y que es necesaria para conseguir que la pobreza no sea un statu quo».
Por su parte, Felipe Hortelano subrayó que «Angelini Farmacéutica está comprometida con la sociedad para mejorar la calidad de vida de todos aquellos que la componen, concretamente con los que se encuentran en situación de exclusión social y pobreza», y buena prueba de ello es el patrocinio que ofrece a la tarea de Banco Farmacéutico. «Acciones como las que lleva a cabo Banco Farmacéutico disponen de nuestro total apoyo», concluyó Hortelano.
En el mismo sentido se expresó Jordi Roglà, para quien entidades como Banco Farmacéutico realizan una labor «fundamental» porque «evitan el deterioro de la situación personal, familiar y de autoestima de las personas».
Por último, el vicepresidente del Colegio de Barcelona, Francesc Pla, aprovechó su presencia en el acto para apuntar que las puertas del Colegio estarán siempre abiertas para iniciativas de los farmacéuticos como la actual, al mismo tiempo que felicitó al Banco Farmacéutico «por la puesta en marcha de una acción complicada que requiere de un gran esfuerzo».
Desde 2008
Banco Farmacéutico inició su actividad el año 2008 como asociación sin ánimo de lucro con el objetivo de facilitar medicamentos a personas en situación de pobreza y exclusión social en nuestro país. El trabajo de todo el año se materializa en la Jornada anual de Recogida de Medicamentos, la próxima edición de la cual tendrá lugar el 9 de febrero de 2013.
Para llevar a cabo esta labor solidaria, se cuenta con cuatro agentes principales: el voluntariado, que informa e invita a la ciudadanía a participar comprando un medicamento; las farmacias, que se adhieren a la campaña e indican cuáles son los medicamentos que se pueden comprar; la ciudadanía, que compra el medicamento que se destinará a alguna de las entidades asistenciales participantes; y estas entidades, que reciben y distribuyen los medicamentos entre las personas usuarias de éstas.
En estos cinco años de vida, en que se han sucedido cinco Jornadas de Recogida de Medicamentos, se ha pasado de 15 (2008) a 223 (2012) farmacias colaboradoras; de 38 a 400 voluntarios; de 828 medicamentos recogidos por un valor de 2.500 euros a 10.000 medicamentos por un valor de 33.500 euros; y de 3.000 personas atendidas a través de 8 entidades a 15.000 personas atendidas a través de cincuenta entidades.