Con la implantación del albarán electrónico, en los próximos meses se va a producir un cambio que afecta a la relación de las oficinas de farmacia con sus proveedores, en especial con los almacenes. Este cambio será, a mi modo de ver, completamente disruptivo, y marcará un antes y un después para las oficinas de farmacia que lo vean como algo necesario y se decidan a incorporarlo.
Nos encontramos en un momento en el que la disrupción que han supuesto las tecnologías digitales a cualquier nivel ya no se discute, y así cualquier organización las está adoptando en mayor o menor medida. Incluso conceptos como «cloud», «IoT» o «Big Data», que hace poco eran desconocidos para la mayoría, actualmente forman parte del vocabulario cotidiano.
Uno de los cambios más profundos de las sociedades modernas es el que ha provocado la irrupción de las tecnologías de la información y comunicación (TIC). Es una obviedad que internet ha cambiado la vida de las personas del mundo desarrollado y las condiciones en las que deben trabajar para aumentar su competitividad en los distintos sectores económicos. No es el objeto de este artículo glosar las oportunidades que ofrecen estas tecnologías, que son muchas, sino analizar y reflexionar sobre las nuevas obligaciones y responsabilidades que comporta la implantación de un cambio tan radical.
Cooperación. Ésta es una palabra que está en el ADN de la SEFAC como sociedad científica y que forma parte de sus valores desde sus orígenes. Esa palabra imbuye la totalidad de las acciones que llevamos a cabo para mejorar la labor científica y asistencial de los farmacéuticos comunitarios y se traslada a los agentes con los que mantenemos relaciones activas. Uno de estos colectivos es el de los médicos, en particular los de atención primaria, pero no solo estos.
Óscar López es consciente de que en esta edición de Infarma se enfrenta a un desafío aún mayor, si cabe, que hace dos años. Infarma cumple 30 años y las expectativas son muy altas. En esta entrevista nos avanza algunas de las novedades con las que esperan sorprender a los asistentes.
Luis González está satisfecho. Cree que Infarma 2018 superará las cifras de la edición de hace dos años y espera, además, que el sector entre en una etapa de estabilidad y tranquilidad que le permita ofrecer a los ciudadanos el servicio que demandan.