Un millar de formatos de medicamentos han sufrido modificaciones desde 2012 en España para ajustar las dosis al tratamiento que necesita el paciente. Es una de las actuaciones llevadas a cabo por el Gobierno para racionalizar el uso de antibióticos en el país, según ha declarado el ministro de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Alfonso Alonso, quien ha participado hoy en la conmemoración del Día Europeo para el Uso Prudente de los Antibióticos.
El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad ha celebrado hoy una Jornada Informativa sobre el buen uso de los antibióticos, coincidiendo con el Día Europeo para el Uso Prudente de estos medicamentos. La secretaria general de sanidad y consumo y presidenta de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), Pilar Farjas, ha inaugurado esta jornada, que ha tenido como objetivo dar a conocer las principales líneas estratégicas y acciones que se contemplan en el Plan Nacional Estratégico y de Acción para reducir el riesgo de selección y diseminación de resistencias a los antimicrobianos, así como presentar las principales actividades que en este campo se están llevando a cabo desde el Gobierno.
«Solamente alrededor del 20% de las faringoamigdalitis son debidas a infecciones bacterianas, y, por lo tanto, tributarias de tratamiento antibiótico», ha explicado Xavier Boleda, farmacéutico comunitario y miembro del grupo respiratorio de la Sociedad Española de Farmacia Comunitaria (SEFAC). «El resto están provocadas, en su mayoría, por virus; por tanto, una vez aplicados los criterios diagnósticos diferenciales pueden y deben ser tratadas con otros medios alternativos a los antibióticos», ha matizado Boleda.
Mylan lanza Levofloxacino Mylan EFG, indicado para el tratamiento de las siguientes infecciones leves o moderadas, cuando son debidas a microorganismos sensibles al levofloxacino: sinusitis bacteriana aguda, exacerbación bacteriana aguda de la bronquitis crónica, neumonía adquirida en la comunidad, infecciones complicadas del tracto urinario incluyendo pielonefritis, prostatitis bacteriana crónica e infecciones de piel y tejidos blandos.
La faringoamigdalitis es la patología que provoca el mayor consumo inadecuado de antibióticos. Las farmacias comunitarias reciben a diario visitas de pacientes aquejados por un proceso de dolor de garganta que reclaman la dispensación de un antibiótico, sin presentar la obligatoria receta médica y, por tanto, sin el diagnóstico médico previo que confirme su necesidad. En realidad, en un alto porcentaje de los casos se trata de infecciones víricas (no bacterianas) para las que no están indicados, por inefectivos, estos medicamentos.