Rosa María Arbonés es titular, desde hace 23 años, de la farmacia emplazada en la calle Pallars n.º 231, en el barrio barcelonés del Poblenou. Desde entonces, junto a Joaquim Braun, compañeros de profesión y de estudios en la Facultad de Farmacia de Barcelona, empezaron un nuevo camino: «Uno de los más largos de nuestra vida».
O soy muy viejo ya, o el tiempo se ha acelerado sin que me haya dado cuenta. Me acuerdo perfectamente de los conflictos generados por el servicio a domicilio que algunas farmacias ofrecían, y de las denuncias que ese servicio generaba. También me acuerdo de las posiciones encontradas respecto al cobro mediante tarjeta de crédito.
La sociedad desarrollada en la que vivimos nos proporciona multitud de productos y servicios que nos hacen la vida más cómoda. Muchos más de los que les ofrecía a nuestros padres. Incluso más de los que, hace apenas una década, nos ofrecía a nosotros mismos.
De un tiempo a esta parte –cuando era niño no sucedía– observo una costumbre nueva. En según qué portales alguien, es de suponer algún vecino harto o la persona que se encarga de la escalera, coloca botellas de plástico llenas de agua adosadas a la parte baja de la pared.
M.ª Luisa Carrillo es la farmacéutica titular de la farmacia La Vega, una farmacia abierta siempre. Las 24 horas del día, los 365 días del año. La farmacia está situada en Alcobendas (Madrid), muy cerca de un gran centro comercial en el área farmacéutica de La Moraleja.
La noche puede ser muy larga y negra, pero siempre acaba saliendo el sol. Sin estridencias, el alba se asoma por el horizonte para anunciar que un nuevo día se acerca. No se trata nunca de un gran acontecimiento, tan sólo es un pequeño síntoma de que algo puede cambiar, tan sólo un matiz en el negro absoluto.
La farmacia española está de moda. Sus representantes ocupan los puestos más importantes a nivel mundial. Una ex presidenta y el actual (recientemente renovado) presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos ostentan las presidencias de la FIP y de la PGEU, respectivamente. En principio es una buena noticia, evidentemente lo es para ellos. En ambos casos se trata de dos farmacéuticos que han dedicado y dedican muchos esfuerzos para la mejora de la profesión, y debería ser también una buena noticia para la farmacia española en general porque la voz de los que defienden un determinado modelo de farmacia es la que sonará en la cima de las organizaciones corporativas europeas y mundiales.
La estrategia preponderante del sector en estos años se ha basado en reforzar el papel sanitario de la red de farmacias para justificar precisamente la bondad de esa red regulada y para, al fin y al cabo, poder mantener una regulación que, en cualquier caso, es más coherente con la realidad de una red sanitaria que con la de una red comercial especializada.
Demasiado a menudo confundimos simplicidad con simplificación. La simplicidad es necesaria para clarificar los conceptos, para hacer entendibles las ideas. La simplificación, en cambio, es sinónimo de vagancia, de superficialidad, cuando no de tergiversación.